Demos gracias al Señor

 

No hay momento tan importante como el momento presente. Y todo momento, muy especialmente el momento presente, es momento para dar gracias a Dios.

 

Esta semana,  la semana de “Thanksgiving” este año coincide con dos otros grandes momentos; el final del año litúrgico y el comienzo del nuevo año litúrgico.¡ feliz nuevo año litúrgico para todos!

 

La fiesta de “THanksgiving” si bien es una que tiene una gran importancia histórica, cultural religiosa y tradicional aquí en los Estados Unidos, no se celebra universalmente en nuestros países. pero al llegar aquí la celebramos porque es parte de la cultura a la cual nos vamos integrando.

 

Lo interesante de esta fiesta es que no pertenece a ningún grupo religioso en particular sino a todos., Esto es, cristianos, judíos, y todas las religiones que creen en Dios, la celebran. Dan gracias. Es esencialmente una fiesta en la cual la familia se reune a dar gracias a Dios por tantos favores que hemos recibido durante el pasado año y durante toda nuestra vida.

 

Al mismo tiempo, en este mismo momento, en la liturgia mientras nos acercamos al primer domingo de adviento, se nos invita a prepararnos para la conmemoración de la primera venida de Jesús al mundo. Mientras que las lecturas enfocan en la segunda venida de Jesús.

 

En nuestra iglesia en el pasado, estas lecturas del final del año Litúrgico

y del comienzo del nuevo año han sido presentadas de manera que nos cause temor.  Ciertamente el final de nuestra vida en particular y el final de los tiempos en general no son temas agradables.

 

Pero si estudiamos detenidamente los textos evangélicos que se nos presentan para nuestra consideración, encontraremos invariablemente un mensaje de esperanza.

 

Sí,  la vida de cada uno de nosotros en la tierra llegará a su fin tarde o temprano. Sí, el mundo tal como lo conocemos llegará a su fin. Nos dice el evangelio que el día y la hora ni los ángeles del cielo ni el Hijo lo saben. Solamente el Padre lo sabe.

 

Pero en cada uno de estos pasajes evangélicos encontramos a Jesús buscando y encontrando a sus elegidos. Y nos invitan a confiar en su gran misericordia, en su gran amor por nosotros.

 

El mensaje central, la esencia del mensaje de Jesús es que Dios es un papá bueno, nuestro Papacito que tanto nos ama que mandó a su hijo al mundo para que los que recibiéramos su mensaje no muriéramos para siempre sino que fuéramos a vivir en su regazo por toda la eternidad.

 

El regalo más grande, la razón más grande por lo cual debemos dar gracias a Dios nuestro padre en todo momento es por su hijo Jesucristo que siendo humano como nosotros nos conduce amorosamente al Padre.

 

En este momento en que celebramos la fiesta de acción de gracias, cerramos un año litúrgico y comenzamos un Año Nuevo litúrgico  este primer domingo de adviento, notamos que los vecindarios se llenan de luces que anuncian que la Navidad se acerca.

 

Te deseo que cada vez que veas una casa encendida con luces de Navidad, recuerdes que Cristo que  es la  luz del mundo, te ama, te conoce por nombre, siempre está contigo, te bendice y desea que seas feliz eternamente. Y Por eso debes dar infinitas gracias

 

Feliz fiesta de acción de gracias

 

Bendecido y provechoso adviento

 

Santa y feliz Navidad

 

El caballero de Nuestra Señora